Sunday, March 5, 2006
REFLEXIONES DE UN SIMPLE MORTAL:
POR: JAVIER SANTAMARÍA
Jahesa@hotmail.com
Nunca he sido fanático acérrimo a algo o alguien, abrigo mi propia fe y por supuesto amor y respeto por ese Ser Supremo que mueve el incognoscible e infinito cosmos, en el que tan solo somos una minúscula pero muy minúscula partícula auto denominada: raza humana. Somos unos seres supuestamente inteligentes y en gran manera privilegiados, pues tenemos la oportunidad maravillosa de coexistir y vivir en un planeta tocado por la benevolencia Divina, al que vertiginosamente y sin razón alguna estamos llevando a la destrucción, movidos estúpidamente por sentimientos negativos como la sed de poder y riqueza, el egoísmo y la banalidad.
Para las grandes potencias mundiales importan más sus arcas repletas de dólares y euros con que fortalecer y agigantar su poderío, que el bienestar de nuestros congéneres y la preservación de la madre naturaleza, principales victimas de una mentalidad materialista y vacía que se convierte en el gran talón de Aquiles, que tarde o temprano nos precipitara al abismo desolado de una hecatombe apocalíptica.
“Amaos los unos a los otros como yo os he amado”, palabras sabias de ese gran maestro que dividió la historia de la humanidad en dos, el llamado hijo de Dios nos heredo un legado importante en sus enseñanzas, mismas que de aplicarse al pie de la letra harían del planeta tierra: “El Paraíso soñado”.
Paradójicamente en nuestra naturaleza se contraponen un polo positivo y uno negativo, conjugados en un cuerpo de carne y hueso que abriga una esencia espiritual no reconocida totalmente. Pecamos al creernos únicos y soberanos en el cosmos, negando la existencia de lo innegable, ¿ agnósticos o materialistas? o simple excusa que alimenta el ego de una humanidad que actualmente cimienta su existencia a ciegas, deslumbrados por los destellos del oropel que mueve hoy por hoy el mundo.
Para ratificar lo que digo no basta sino encender el televisor, escuchar la radio, leer un periódico, en cuestión de segundos se obtiene información sobre lo que ocurre alrededor del mundo: Estados Unidos invade Irak, George Michael se declara gay, Shakira vendió 10 millones de copias de su más reciente trabajo, la sequía y la hambruna amenazan el continente africano, Juanes emblema de la música en español, la gripa aviar crónica de una pandemia mundial, Julia Roberts recibe 23 millones por película, el conflicto armado en Colombia deja más muertos que la guerra de Irak, Las pasarelas de la alta costura de Milano reciben a Silvia Cherassi, El papa condena el aborto y la clonación, un paparazzi logro fotografiar a Brat Pit como Dios lo trajo al mundo, Zharick León se desnudo para interview, Atentado kamikaze en medio oriente dejo un centenar de muertos, Colombia firma el TLC, Araceli Arambula el nuevo amor de Luis Miguel, se extinguen los chimpancés y gorilas Del congo, el calentamiento global amenaza los ecosistemas del planeta, caricaturas de Alá desatan conflicto, prelado de la iglesia acusado por abuso sexual, se difunde video porno de Paris Hilton por Internet, el SIDA sigue en aumento, continua el bloqueo comercial a Cuba, imagen de la virgen aparece en la pared de una humilde residencia, “Rebelde” los nuevos ídolos de la juventud latina...¡basta!,¿Será que algún día las noticias que se publiquen en los periódicos, se escuchen en radio y se vean en la televisión dejaran de ser tan disímiles y en la mayoría de ocasiones tan poco gratas y estúpidamente fatuas?, a lo mejor si, pero para eso, la humanidad tendría que trascender radicalmente del pensamiento materialista a ese lado espiritual inexplorado que guarda sin duda la respuesta al gran interrogante: ¿Quiénes somos, de donde venimos y para donde vamos?, en resumen la razón clara de nuestra existencia. La ciencia es un instrumento importante, pero no el único camino para descifrar ese acertijo.
Cada cual cree lo que quiere creer y enfoca ese fugaz paso por la tierra de la manera que le viene en gana, tenemos la libertad para conducirnos por el bien o por el mal, por el servicio a nuestros semejantes, por enriquecernos egoístamente y buscar la vanagloria o sencillamente caminar por este sendero sin dejar huella, dejando que la vida pase y se escurra como el agua entre los dedos o quizá reaccionar y encontrarle un sentido practico a las palabras de ese maestro.
Todo seria tan diferente, si al menos un día nos tomáramos la molestia de hacer un alto a la rutina, dejar de actuar como autómatas en esta sociedad moderna manipulada por esteriotipados cánones y patrones de vida engañosos, para preguntarnos: ¿Qué hemos hecho hoy por nuestros semejantes?, acaso siempre nos hacemos los de la vista gorda cuando vemos los niños africanos con los huesos forrados en el cuero y sus bocas enjambradas de moscas, o ante la incierta suerte de los niños en los países tercermundistas, pues los nuestros son gordos y rozagantes?, ¿No nos conmueve ni una sola fibra la matanza irracional de especies animales, ni nos inmuta la tala indiscriminada de bosques?, ¿Nos aterra, pero ignoramos la violencia que vivimos, pues aún no nos has tocado directamente?, ¿Lamentamos la perdida de valores, pero no hacemos nada para rescatarlos?.
Tanta apatía y Hedonismo ¡aterra!, ¡Es hora de reaccionar!, No le invito a que se convierta en un miembro más de las hermanitas de la caridad o la congregación creada por una grandiosa mujer en Calcuta, ni a que le dé limosna a cuanto mendigo se tope en la calle, recuerde: “No hay que dar el pez, hay que enseñar a pescar”, sencillamente le convoco a que no vivamos por vivir, a dejar de ser egoístas, pensar en grande y para bien mancomunado, crea en lo que crea, profese o no credo o religión, siempre “hay que estar en paz con Dios cualquiera que sea tu idea de él” , lo reza un viejo y sabio poema. Amemos a nuestro prójimo, vera que poco a poco forjaremos una nueva generación altruista, amorosa e inteligente, capaz de evitar lo que hoy presagiamos como inevitable por la absurda inconciencia de unos pocos locos.