Macaulay Culkin-actor norteamericano
Hace varios años sostenía una no habitual conversación con uno de los tantos jefes que he tenido durante mi vida laboral, la verdad sea dicha, el señor de 67 años, delgado, serio y discreto, era muy poco dado a entrar en confianza con los empleados a cargo, se encontraba radicado en Cali a fuerza, pues residía en la ciudad de Pereira y la situación de desempleo lo había forzado a aceptar trasladarse solo a la llamada Sultana del Valle, Don Efrén González llevaba cerca de seis meses sin ver a su familia.
Mi Jefe huraño acababa de recibir una llamada, misma que le había cambiado por completo la expresión de su rostro, impulsándolo a entrar en repentina confianza conmigo para contarme, sin entrar en muchos detalles, que su familia venía a visitarlo y estaban a punto de llegar a la empresa, sorpresa que lo tenía pletórico de felicidad. Don Efrén me recomendó que estuviera al pendiente de la llegada de su familia, pues él debía retirarse unos minutos para hacerle una llamada al dueño del aviso con la intención de pedirle un permiso especial de unos días para tender a su familia.
Hay veces en las que cometemos impertinencias sin querer y ese día cometí una, todo por sacar conclusiones prematuras guiado por las simples apariencias, cuando vi ingresar a la empresa a dos damas, una de aproximadamente 35 años acompañada de otra señora sesentona y dos pequeños niños, uno de 2 años y otro de 5 años, supuse de inmediato que se trataba de la esposa de Don Efrén, su hija y sus nietos , les di la bienvenida y me encamine a la oficina de mi jefe para anunciarle la llegada de la ansiada visita:
¡Don Efrén llegaron su esposa, su hija y sus nietos!
Mi jefe levanto su rostro y clavo sus ojillos tristones en mi humanidad, torció los labios y me respondió:
No son mis nietos…son mis hijos, mi esposa y mi suegra.
De repente, nunca llegue a imaginar que un hombre sesentón pudiese llegar a tener unos hijos tan pequeños, cuando se supone por la lógica de la vida, que a esa edad mi jefe ya debería estar consintiendo nietos y no hijos y mucho menos que su esposa fuera la atractiva dama de 35 años y no la señora mayor. Cambie de colores como semáforo y con una mueca de vergüenza trate de resarcir la soberana imprudencia.
Otra situación que se ha vuelto común en nuestra sociedad, principalmente en las clases media y baja, contraria creo yo a esas lógicas de la vida, se configura al ver hoy en día abuelos de 30 y 35 años, pues sus vástagos les han dado ese privilegio tempranamente; niños convertidos en “padres”, solo de título, pues las labores inherentes a la crianza y demás recaen sobre los dichosos jóvenes abuelos, quienes se dan al “dolor” de que su niña hubiese “metido las patas” y adoptan a su nieto como un hijo más. En el caso de los varones convertidos en padres a temprana edad, es para sus padres una hazaña que los enorgullece, generalmente esos padres-abuelos jóvenes, también procrearon en plena adolescencia y hay empatía total frente a esta situación.
Dentro de los casos de famosos que han sido padres en el otoño de sus vidas se encuentran el actor y director Pepe Sánchez, el director Julio Cesar Luna, el famoso Charles Chaplin, el actor mexicano Fernando Luján, Julio Iglesias Puga, padre del famoso cantante español.
En la lista de los famosos que han sido padres tempranamente están Macaulay Culkin, el protagonista de la película “mi pobre angelito”, el cantante boricua Jerry Riverra, quien acaba de convertirse en un abuelo joven, Jamie Lynn Spears hermana de Brithney Spears, Alfie Patten, el niño británico de 11 años, al que le indilgaron una bebe de una jovencita de 13 años.
Como cambian los tiempos y de qué manera, ahora bien, quisiera preguntar:
¿Es mejor ser el padre de los nietos o el abuelo de los hijos? o seguir los lineamientos sabios y coherentes de la vida.
http://soyperiodista.com/entretenimiento/nota-9635-el-padre-de-mis-nietos-o-el-abuelo-de-mis-hijos
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