Thursday, May 17, 2007

Ser o No Ser -Frívolo-, He Allí el Dilema

Una de las vainas que más le preocupa a una persona, medianamente pensante, es que a alguien se le ocurra llamarlo frívolo. Según la Real Academia Española, una persona frívola es una persona ligera, veleidosa, banal e insustancial. El antónimo de frívolo podría ser reflexivo, aunque en mi barrio le decimos intenso.

Por supuesto que a nadie en su sano juicio, a menos que sea Paris Hilton, le gustaría ser ligero, veleidoso, banal o insustancial; pero eso nos lleva a ser muy rígidos con ciertos conceptos. Por ejemplo, admitir que no nos gusta la música académica es un pecado, decir que una película francesa es mala es un horror, admirar a la intelectualidad gringa en vez de a la intelectualidad europea es un suicidio, ir de shopping es un sacrilegio, recostar el tostón al ritmo del reguetón es la muerte, poner las fotos de Veronika Zemanova y de Cinthia Fernández para tener más hits en tu blog es una banalidad. Muchos no se permiten este tipo de indulgencias y son frívolos de closet.

Pero como muchos de ustedes saben que a mí me encantan las listas; les pregunto: ¿Qué indulgencias te permites, que pueda ser considerada frívola?

¡Salte del closet!

Ciro